Aston de Ediciones s.a. fue una editorial catalana dedicada a la edición y comercialización de cromos. Se fundó en el año 1988 y ese mismo año ya lanzó al mercado un peculiar álbum de cromos titulado: “Efectos Especiales. La Magia del cine y TV”
Efectos especiales constaba de 24 páginas con 239 cromos adhesivos más 25 “lumínicos” que ocupaban el póster central. Este álbum hizo las delicias de los niños aficionados al cine de terror pues sus cromos contenían imágenes, algunas truculentas, de películas de terror de aquella época. Sin olvidar las de acción o ciencia ficción. Estaban separadas por temas como mutantes, robots, alienígenas, monstruos, entre otros y un tema final sin venir a cuento titulado cantantes. Un álbum de cromos que no pasaría desapercibido para los padres porque algunas de las imágenes que contenía eran impactantes.
El póster central estaba compuesto de cromos de naves de los que brillan en la oscuridad.
El albúm prometía desvelar los secretos de las películas en materia de efectos especiales pero la verdad es que no se mataban en desvelar mucha cosa y a menudo nada. Las explicaciones de los cromos contenían el titulo de la película y una descripción del efecto o del cromo bastante pachanguera.
¿Quieres saber el efecto volador de Superman? Pues no lo vas a saber... Y además cromos de videojuegos...
Este para mí se lleva el premio al mejor cromo por el cachondo texto que le acompaña. Menos mal que informa que es el de las gafas para no crear confusión.
Madera. Corcho, plástico y pintura y tira millas. En el cromo de David Allen es con LL.